Fallece el cantante estadounidense Tony Bennett

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Coinciden los titulares de los diferentes medios de comunicación, en que Tony Bennett es el último de los grandes cantantes melódicos del pasado siglo XX denominados "crooners", representados principalmente por Frank Sinatra, Bing Crosby y Dean Martin. Más joven que ellos y con sus siete décadas en activo, es sin duda el de mayor carrera musical. Sin tener la capacidad y el registro vocal de otros cantantes, quizás por eso sea el que más se ajusta a la definición de este término por el que se les denomina (crooner deriva del verbo inglés to croon, que indica una forma de cantar suave y susurrante, con mucho sentimiento) y eso Tony Bennett lo sabía hacer muy bien, siempre con su porte elegante y distinguido. En su dilatada carrera, grabó unos 70 discos con más de 50 millones de copias vendidas y recibió 20 premios Grammy. Y en su amplio repertorio no solamente se encuentran baladas o temas románticos, sino también temas clásicos estándar de jazz, habiendo actuado y grabado diversos discos con grandes músicos de este género, como el pianista y director de orquesta Count Basie o el también pianista Bill Evans y más recientemente, en 2018, con la canadiense Diana Krall. Desde los años noventa del pasado siglo se hicieron muy populares sus actuaciones y grabaciones de discos con dúos junto a otros cantantes muy diversos y heterogéneos, no solamente de su generación (Barbra Streisand, James Taylor, Paul McCartney, Juanes, Elton John, Steve Wonder, Elvis Costello, Sting, Michael Bublé, Bono, Aretha Franklin, Willie Nelson, Norah Jones, George Michael, Josh Groban, Alejandro Sanz, entre muchos otros). Su talante amable y accesible, a pesar de su edad, hizo que nadie desoyera su invitación a cantar con él y el resultado fue algunos dúos sorprendentes con jóvenes músicos de pop o rock, como ocurrió en 2011 con la rebelde Amy Winehouse. Enamoró a la sofisticada cantante pop Lady Gaga, con la que hizo un primer álbum en 2014, "Cheek to Cheek", de clásicos de jazz, que fue número 1 en las listas y posibilitó un segundo disco con ella en 2021, "Love for sale", con obras del compositor Cole Porter, que significó la última grabación de Tony Bennet, afectado ya de alzhéimer. En alusión a su canción icónica, I left my heart in San Francisco, su corazón no solamente se quedó en la ciudad californiana sino en muchos de los que amamos esta música y lo hemos seguido durante años y comprado sus discos. Lo seguiremos escuchando hasta que también pasemos al infinito.